
Encuestas recientes afirman que el no kirchnerismo representa, en la actualidad, el grupo más voluminoso del espectro político nacional. Parece que siete de cada diez argentinos están desagradados con los K. Sin embargo, desde esta columna nos permitimos disentir con el dato y sostener que hay otra población aún más tupida que el anti-kakismo y que encabeza el ranking de popularidad: el partido de los crédulos.
Porque ¿cómo se le dice sino “crédulos” a los que sueñan hoy con que Eduardo Duhalde (quien manipuló en connivencia con Raúl Alfonsín la caída del presidente De la Rúa) va a salvarnos de lo que él mismo encaramó en la cúspide del poder? Crédulos cuando ni se preguntan por qué Duhalde no es sujeto de los típicos embates K como los sufre cada uno de los que realmente resultan molestos a los planes del gobierno.
Y ¿cómo se le dice sino “crédulos” a quienes padecen y rechazan los perjuicios estructurales del peronismo hace décadas y cuando votan eligen más peronistas creyendo que serán distintos a la filosofía que los alimenta? Crédulos los miles y miles de entusiastas del “peronismo disidente” que se comieron el amague y creyeron que “disidente” pesaba más que “peronismo” y ya empezaron a comprobar que importan más las raíces del engendro que la heterogénea estética de sus frutos.
Y ¿cómo se le dice sino “crédulos” a los que supusieron que los “dos puntitos” que el día de la elección legislativa le comieron la sonrisa a Néstor iban a determinar un cambio de rumbo, de conducta, de maneras y de planes? Crédulos los que se empujaban en la puerta de Balcarce 50 para entrar a debatir con uno de esos esbirros K con característica corbata de brillante acetato la reforma política y sacarse la foto correspondiente mientras el reloj corría a favor del “derrotado”.
Y ¿cómo se le dice sino “crédulos” a los que se entusiasman con la popularidad de Julio Cobos, obviando que la alcanzó traicionando al radicalismo primero y a los Kirchner después? Crédulos de lujo los que no interpretan el uso que ambos damnificados, por distintas vías, están haciendo de su figura; crédulos hasta la ternura los que imaginan larga y fructífera vida política para el traidor en stéreo.
Crédulos, también, los que repiten como loros esa aburrida consigna sobre que “sin el peronismo no se puede gobernar”; falacia que está en boca de muchos, desde el taxista que opina de todo porque escucha radio el día entero, hasta el Jefe de Gobierno porteño que, a diferencia del taxista, casi no opina ni escucha pero adhiere al apotegma maldito. Crédulos porque el peronismo gobierna siempre, sea o no sea del partido el presidente de turno porque su filosofía está metida en todos lados; en las leyes, demagógicas y asistencialistas; en los jueces, dependientes y temerosos del poder político; en el adiposo aparato estatal que ellos engordaron y que nadie puso a dieta. Pero también está en el inconsciente colectivo que identifica derechos inexistentes y los reclama antes de responder por sus obligaciones.
Si los crédulos fueran simplemente optimistas equivocados y nadie padeciera las consecuencias de su mal análisis no serían relevantes. Pero el volumen los hace protagonistas. Que “metan la pata” de a tantos sí tiene trascendencia porque enfrente hay un astuto que capitaliza cada error y si algo tenemos en el panorama actual es un “capitalizador” de fuste o, más bien, de temer.
Duhalde fogonea la destitución de Cristina, lo que sería una salida exquisita para el matrimonio: zafan de conducir este polvorín en los próximos meses y la presidente se erige en una especie de Zelaya (mujer, para mejor) sufriente, débil y con todo el apoyo de los “hermanos” latinoamericanos. Dios nos asista y que no les salga la movida.
Mientras tanto, los piquetes, los asaltos, la delincuencia de gran porte (juego, narcotráfico y lavado de dinero), las tomas de fábricas, empresas, calles, tierras, escuelas y facultades por parte del troskismo y el maoísmo más radicalizado avanza sin prisa ni freno. No falta demasiado para que tengamos que salir a “bancar” a Hugo Moyano para evitar que ese otro sindicalismo expropiador y violento dé el golpe de timón que se está gestando desde hace meses y pase de minoría a conductor formal del movimiento obrero. Esa es la pulseada que asoma y ahí sí los quiero ver.
Entonces, a ver si los crédulos se avivan: ni Duhalde nos va a salvar de nada (ni aunque quisiera); ni Cobos aguanta un round a la maroma que se viene; ni el peronismo disidente va a enfrentar al autoritarismo kirchnerista ahora, después del 10 de diciembre ni nunca porque no puede, no quiere y no sabe. Mientras alguien encuentra para el “cobismo” una definición mejor que “cáscara vacía”, para el “duhaldismo” una más ajustada que “más de lo mismo” y para el “peronismo disidente” una superior a “menos de lo mismo” hay una exclamación abarcadora que, como un himno, representa cabalmente a los pocos individuos que no militan en el partido de los crédulos: ¡Socorro!
María....coincido en todo lo que has escrito en este artículo.....hace un tiempo escuché por radio a Solá, diciendo más o menos lo siguiente "sería conveniente para el país que el próximo presidente sea peronista, ya que si no sería muy difícil que la Argentina pueda ser gobernable"......y el periodidta, que no me acuerdo quien era, no le dijo absolutamente nada.....esto forma parte del partido de los crédulos.....
ResponderBorrarY el resto del panorama es pura teoría foquista (guevarista), alentada y auspiciada por los k.....
Roberto Espinosa
Son alrededor de las 3 de la mañana y me encuentro con su texto, como siempre inteligente y diciendo más de lo que aparenta decir con buenos modales pero Usted sabe muy bien que los "crédulos" cuando se lean van a leer "estúpiidos" y el "socorro" final puede que los zamarree..sí..sí.. Cobos..la hojarasca..es un texto de García Marquez
ResponderBorrarJ Schroder
Extraordinario Editorial Pequeña y Gran MZ. Aqui tienes al menos uno que se agrega fervientemente al bando de los que gritamos : ¡¡¡ SOCORRO !!!
ResponderBorrarLuis Almada
Lamento tener que subscribir a cada punto, e imagino que no fue mas extenso el post por que la lista tiende a ser muy grande.
ResponderBorrarLos que dicen desde el peronismo que el próximo presidente debe ser peronista, no es mas que un acto de chantaje extorsivo propio de un delincuente común, debemos comenzar a desarmar uno a uno estas cadenas que nos hacen repetir una y otra vez lo mismo pero con mayor daño a la sociedad.
En la mente social tenemos el concepto que vendrá un salvador y hará de nuestra nación un país grande… pero cada día mas me doy cuenta que somos un país inmaduro que es incapaz de aprender lecciones de verdad.
Solo me resta decir… Atentos al grito de MALON!!!
Muy bueno. Para alimentar el pánico agrego que para colmo de males es un partido que puede asumir cualquier tipo de liderazgo y cualquier programa, vale decir cualquier contenido. Una especie de organismo baboso que va asumiendo diferentes e impensadas formas.. Y eso no es lo peor.. Lo peor a mi criterio es que cualquiera es un potencial miembro de ese partido y la mayoría de las personas, muy atinadas en la superficie, sólo revela su carácter crédulo una vez dada la oportunidad. Claro me van a decir "chocolate por la noticia, siempre en la cancha se ven los pingos". Igual me parece que es un poco más profundo, porque ya no se trata de distinguir si este pingo es bueno o malo, sino directamente de si es o no un pingo. Dado que otra característica que los reúne es la incapacidad de aprendizaje, capacidad que por default uno le asigna a cualquier persona a la hora de juzgar un error.
ResponderBorrarEn fin... Me pone contenta que al menos sigas pidiendo socorro. Eso revela tu costado esperanzado (dije esperanzado, no crédulo, eh?). Saludos.
Gracias x sus comentarios!
ResponderBorrarInsisto con mi teoría: no es pero sino barbaridades de los K. El drama es q la opción a ellos es la izquierda radicalizada, x lo tanto vamos a tener q defenderlos para no caer en los D´Elía, Pérsico, Carlos Heller, Filmus etc, etc, etc. Como dice Teves, es patética la falta de "pingos"...!!!
¡¡¡María, sencillamente perfecto!!! No queda márgen para ningun aporte ni comentario
ResponderBorrarMaría, soy nuevo en el blog, y este es mi primer comentario,ya que al leer la nota me dieron ganas de comentar. coincido totalmente con usted, ya que en un país lleno de ciegos, un REY tuerto nos gobierna a todos y si la "oposición" no hace nada, es porque son cómplices.
ResponderBorrarsaludos
Ignacio Galmes, estudiante de Cs Políticas UCES