
Cierto es que nunca hemos coincidido demasiado. Ni en filosofía, autores o teoría económica; mucho menos en política o historia. No tenemos los mismos gustos, no compartimos amigos, pasado, modos ni modales Pero hoy, 20 de enero, por primera vez, lamento no coincidir con ella acá, en Washington porque el planeta está pendiente de Washington por estas horas. El planeta, menos ella. Y Castro. Si fuera sólo una abogada argentina, no importaría. Pero es más que eso y no nos está representando bien. Otra vez. En lo personal, por partida doble, ni como mujer ni como Presidenta.
Porque si fuera una abogada cualquiera no le reclamaría que supiera o que entendiera; no cuestionaría el raquitismo de sus aspiraciones ni la explicación berreta que tiene del curso de la historia.
En Estados Unidos, con enorme frecuencia dicen “Think Big”. Es un llamado al esfuerzo, a la superación de los obstáculos y de uno mismo. “Think Big” es casi un slogan, es el canto a la vida que hace este pueblo; es un lema, un sentimiento y una actitud. Qué ironía! ellos, que no tienen himno nacional, chorrean nacionalismo y Cristina, que los imita exclusivamente en la futilidad de apoyar su mano sobre el corazón cuando entona el nuestro, se pasa olímpicamente al cuarto su obligación de estar a la altura de las circunstancias.
Por todo eso me indigna que su lema sea “Think Cheap” porque, si fuera una abogada rasa, no objetaría su personal cotización. Nadie mejor que cada uno para saber lo que vale; pero como mandataria, nos abarata a todos.
Nos abarata cada vez que evalúa incorrectamente cuál es el lugar donde tiene que estar. Hoy, no había lugar en el mundo más importante que Washington para un mandatario y ella pudo haber gozado de una inmerecida alfombra roja, de protocolos varios, de acercamiento y contactos que hubiesen favorecido al país y enriquecido su discurso, últimamente tan profuso como vacuo. De incorporar alguna percepción de lo que es esto, habría podido mechar sus sistemáticas críticas al mundo desarrollado con varios de los motivos que hacen de Occidente el único espacio que permite al hombre la prosecución de sus sueños.
Caminar por las gélidas calles de Washington hoy es un hecho histórico que le agradezco a la vida y a mi propio empeño estar disfrutando. Es una experiencia rica e inolvidable palpar los contrastes; el fervor y las expectativas; el frío y el buen gusto; el consenso y las sonrisas. La gente común que viene por sus medios, sin limosnas estatales costeadas tras el robo oficial a terceros.
Me crucé con cientos de personas; hombres y mujeres anónimos, como yo, probablemente abogados ignotos que sí entendieron, que eligieron el protagonismo y que están acá. Ellos no se lo quisieron perder a diferencia de Cristina, la abogada, nuestra Presidenta, que prefirió visitar a un asesino.
.
Think cheap
ResponderBorrarShop big
Mery, coincidimos pero para "pensar en grande" es necesrio "aprender a pensar", parece tan difícil, al menos deberíamos acostumbrarnos a hacerlo.
ResponderBorrarShop big... buenísimo!!!! Q papelón...!!!
ResponderBorrarTenés razón, Patricia. Pero pensé q Cristina había aprendido a pensar en la facultad...
take it easy ........ a mi me enseñaron a ejercitar el pensamiento mis padres, luego vinieron los colegios, la facultad ..... claro a veces las primeras enseñanzas se olvidan (?)
ResponderBorrarporque no se pueden procesar mis mensajes? MGMelgar
ResponderBorrarDistinción para quién es la reunión con Fidel Castro. Es una verguenza reunirse con ese dictador y asesino. Como quedamos ante los ojos del mundo, como lo último,con toda la morraya que nos rodea. MGMelgar
ResponderBorrarEn el fondo, no te da bronca, Grace, que ella nos haga quedar así frente al mundo? Tiene derecho, le da derecho su investidura a hacer lo q ella prefiere o es al revés? La "carga pública" que significa su cargo le da piedra libre para hacer lo que quiera o la obliga a hacer lo que debe?
ResponderBorrarEste blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
ResponderBorrarPensar que en Cuba, luego de la supuesta reunión con Fidel Castro, afirmó que se trató de una distinción para todos los argentinos.
ResponderBorrar¡Hola María!
ResponderBorrarPor esas cosas que tiene Internet encontré este blog y me alegra mucho.
Lo voy a seguir.
Suerte,
Carlos Stella
hola meri!!! realmente tiene la "sabiduria" de estar en el "lugar no indicado, en el momento no adecuado". te comento que lo de españa fue un papelón... la conocen en europa, entre otras cosas, "como que llega tarde a todos lados"... eso tambien se aplica a su sentido de la oportunidad...
ResponderBorrarsuele trabajar "part time" en argentina y fuera...
en fin, como tu dices, si fuera simplemente una abogada... aunque de verdad no le daria ni el juicio con el consorcio por una gotera!!!
Hola Carlos, el químico!!! Qué bueno que me encontraste! A partir de marzo, me podés escuchar en FM 93.9 de lunes a viernes de 8 a 9 de la mañana. Te espero!
ResponderBorrarSylvia!!! jaja... espero que alguna vez podamos los argentinos tener la certeza sobre los títulos académicos de doña Cristina...
Mientras tanto, me imagino lo que se debe escuchar allá x Europa...! Es lamentable. Abrazo desde Kirchnerlandia!!! Y mandanos novedades de la Madre Patria!